Has comido hace un poco, la tarde está empezando y comienzas a notar una sensación de somnolencia. Te ha pasado, ¿verdad? ¡Claro que sí! Nos ha pasado a todos. Es la siesta que nos está llamando. Por eso hoy vamos a hablar de algunas de las ventajas de dormir la siesta.

El hecho de dormir la siesta es algo “muy de España”, hasta el punto que en el pueblo valenciano de Ador, es casi sagrada desde 2015, guardando silencio desde las 14:00 hasta las 17:00 para que todos sus habitantes puedan practicarla y descansar. Sin embargo, también es cada vez más común ver como se practica la siesta en otros países de América Latina, o incluso en China o Filipinas.

Y es que dormir un poquito a la hora de la siesta tiene bastantes beneficios importantes sobre nuestro organismo, pero también sobre nuestra mente. ¡Vamos a repasar los más destacables!

Ventajas de dormir la siesta: Mejora nuestra memoria

Según varios estudios sobre la siesta, cuando la practicamos, parte de los datos y de la información que recibimos a lo largo del día pasan de ubicarse en el hipocampo a hacerlo en el neocórtex. Desde allí, nuestro cerebro tiene una mejor capacidad para acceder a dicha información (vamos, que no se nos olvidan las cosas con tanta facilidad).

Ventajas de dormir la siesta: Aprendemos más rápido

No sólo mejora nuestra memoria. Si estamos de exámenes o con formación laboral, merece la pena dejar de estudiar al menos durante 30 minutos y dedicarlos a la siesta. Cuando descansamos, nuestro cerebro puede reubicar e incluso deshacerse de información que no necesitamos, estando mejor preparado para recibir y para retener nuevos datos.

Ventajas de dormir la siesta: Ayuda a nuestras defensas

Descansar un poco después de la comida ayuda a nuestro cuerpo a mantenerse en equilibrio, permitiéndole durante el descanso dedicar tiempo a reforzar nuestro propio sistema inmune. Si por cualquier motivo no podemos dormir lo suficiente por la noche, ya sea de manera puntual o habitual, nada como una siesta para compensarlo y descansar las horas mínimas necesarias.

Ventajas de dormir la siesta: Reduce nuestro nivel de estrés

Los días que estemos realmente agotados, podemos permitirnos hacer una siesta más larga, de hasta tres cuartos de hora. Esta siesta nos ayudará a reducir nuestro nivel de estrés. Esto a su vez le permitirá a nuestro cuerpo frenar la hipertensión al reducir la presión arterial, algo que sin duda agradecerá nuestro corazón.

Ventajas de dormir la siesta: Nos permite controlar mejor nuestras emociones

Según diferentes estudios, existe un punto mientras estamos entrando en el “modo siesta” en el que, de manera casi inconsciente, repasamos mentalmente nuestras experiencias del día a día. Esto puede sernos de gran ayuda para procesar mejor nuestras emociones, desde una perspectiva más calmada, tomando un mayor control sobre nuestras reacciones y nuestras decisiones.

Ventajas de dormir la siesta: Nos aporta un mejor estado de ánimo

¿No habéis notado cómo cambia nuestro estado de ánimo aquellos días en los que hemos podido practicar la siesta? En general estamos menos irritables y nos sentimos con mejor humor. Es algo que podemos apreciar en cualquier edad, desde en niños hasta en ancianos. La explicación es sencilla: al descansar, nuestro cerebro recupera sus niveles de serotonina, aumentando nuestro estado de bienestar general.

La siesta es recomendable tanto si realizamos ejercicio físico como si hacemos un esfuerzo intelectual. Si necesitamos recargar energías, no hay nada como una siesta, reemplazado el consumo de café o de bebidas energéticas para estimularnos.

¿Cuánto tiempo debería durar la siesta?

Por lo general, una siesta debería durar entre 20 y 30 minutos. Una siesta de 45 minutos sería para casos en los que realmente hayamos acumulado mucho cansancio, ya que excedernos podría conllevar el desvelarnos por la noche, haciéndonos más mal que bien. Podemos hacerla en la cama, en el sillón, en el sofá o donde más práctico nos resulte.

¡Buena siesta!